Ha pasado casi un año y medio desde que la comunidad de Kubernetes anunció oficialmente la disponibilidad general de la API Gateway, un hito que redefinió cómo se manejan las redes y la gestión del tráfico en los clústeres de Kubernetes. Esto fue más que una simple actualización incremental. Marcó un cambio fundamental en la red para entornos nativos de la nube, ofreciendo un marco poderoso, extensible y expresivo para gestionar la conectividad.
La API de Gateway reemplaza las capacidades limitadas de la API de Ingress con un diseño orientado a roles, recursos estandarizados y extensibilidad. Desde la introducción de enrutamiento y división de tráfico avanzados hasta la habilitación de múltiples inquilinos con su diseño orientado a roles, la API de Gateway desbloquea casos de uso complejos que antes eran difíciles de manejar. No sorprende que este cambio haya impulsado una innovación generalizada en toda la industria, ya que los proveedores, incluido F5, reconocieron su potencial para dar forma al futuro de las redes de Kubernetes.
Sin embargo, la adopción de un nuevo estándar como éste no ocurre de la noche a la mañana. Si bien la API de Gateway ofrece claros beneficios, muchas organizaciones siguen siendo cautelosas. Están sopesando cuidadosamente la complejidad de la migración y las herramientas de Ingress existentes frente a la configuración de enrutamiento estandarizada, pero flexible, de la API de Gateway. Y su decisión de adoptarla no se basa únicamente en limitaciones técnicas, sino en las compensaciones. El tiempo, el esfuerzo y el riesgo que implica la transición deben compensarse con mejoras significativas y tangibles en sus capacidades de red.
Un ritmo más lento de adopción en toda la industria refleja este enfoque cauteloso. Si bien la API de Gateway se considera ampliamente como el futuro de las redes de Kubernetes, muchas organizaciones aún están explorando sus capacidades o evaluando las ventajas y desventajas antes de comprometerse con una adopción a gran escala. Los informes de la comunidad de Kubernetes sugieren que la experimentación con la API Gateway está aumentando constantemente. Los primeros usuarios lo están aprovechando para diversos casos de uso, desde el enrutamiento HTTP simple hasta arquitecturas avanzadas de múltiples inquilinos. Esto demuestra un creciente interés en las posibilidades de la API de Gateway, incluso cuando muchos equipos adoptan una actitud de esperar y ver.
En F5, hemos observado una dinámica similar. Muchos de nuestros clientes están posponiendo la idea de dar el salto inmediato. Esto no se debe a que les falte interés, sino a que están centrados en equilibrar la innovación con la certeza operativa que proporcionan las soluciones maduras de Ingress. Por eso creemos que el viaje hacia la API Gateway no tiene por qué ser apresurado. Simplemente tiene que ser estratégico.
Vamos a desglosarlo. Algunos de los desafíos de migrar a la API de Gateway incluyen:
Pero también hay beneficios sustanciales:
Si hay algo que sabemos sobre la distribución y la infraestructura de las aplicaciones, es esto: el cambio lleva tiempo y requiere convencimiento en toda la empresa. El apoyo, la orientación y la innovación continuos son esenciales incluso para iniciar la transición.
En F5, hemos estado profundamente involucrados en el desarrollo y la evolución de la red Kubernetes. Nos hemos enfrentado a los desafíos de primera mano y hemos ayudado a los equipos a superarlos.
Nuestra experiencia confirma una verdad fundamental: adoptar con éxito la API de Gateway no se trata solo de implementar un nuevo estándar. Se trata de construir una base para el éxito futuro. Para lograrlo, las organizaciones necesitan soluciones que prioricen la simplicidad, el rendimiento, la flexibilidad y un soporte sólido. Así es como estos principios allanan el camino para transiciones más fluidas y preparan el terreno para el valor a largo plazo:
Sabemos que 18 meses no es mucho tiempo y que, aunque la API Gateway abrió un mundo de posibilidades, no significa que todas las organizaciones estén listas para adoptarla todavía.
Para muchos equipos, la API de Ingress no solo es una solución capaz, sino también un componente fundamental de su infraestructura existente. La API de Ingress ha servido como columna vertebral de la red de Kubernetes durante años. Las organizaciones con entornos bien establecidos no necesitan sentirse obligadas a abandonar una solución estable y exitosa.
En F5, somos plenamente conscientes de esta realidad, por lo que no abandonaremos la API de Ingress. Seguimos invirtiendo en el desarrollo del controlador de Ingress F5 NGINX, ofreciendo innovaciones y funciones que lo mantienen robusto, seguro y relevante para los casos de uso modernos.
Para las organizaciones que desean permanecer en Ingress, nos comprometemos a garantizar que siga siendo una solución de alto valor que impulse las cargas de trabajo de Kubernetes actuales con confianza. Para los equipos que exploran la API de Gateway, nuestro F5 NGINX Gateway Fabric especialmente diseñado combina simplicidad moderna, rendimiento y flexibilidad para ayudar a las organizaciones a adoptar el estándar con confianza.
La decisión de cambiar a la API Gateway es un cambio significativo que no tiene por qué ocurrir de la noche a la mañana. Sin embargo, en última instancia, las organizaciones que hagan el cambio se posicionarán para el crecimiento y la innovación, al tiempo que sentarán las bases para el éxito futuro con un sistema moderno, escalable e interoperable que dará forma al futuro de las redes de Kubernetes. Ya sea hoy o en el futuro, en F5 estamos listos cuando usted lo esté. Para obtener más información contáctenos en F5.